FIN DE CURSO . Junio 2008

 

Es el último módulo de este Curso. No he tenido demasiado tiempo para escribir nada. Hemos estado demasiado ocupados  intentando hacer una recopilación de lo que nos ha supuesto este curso. También hemos estado despidiéndonos  y realizando una especie de rito de paso.  Entre ellas ha estado una limpieza “exterior”, simbolizando la interior (¿?) Finaliza una etapa y empieza otra. No estoy muy acostumbrada al nudismo improvisado así que cuando Alfonsi propuso el “manguerazo” me sentí  algo cortada. “Bueno”, pienso “ yo me hago a la idea de que estoy haciendo top less en una playa medio desierta....”.  Realmente lo llevé bastante bien para lo vergonzosa que sigo siendo.

Para el sábado por la noche hemos preparado una fiesta de despedida. Cada uno ha traído distintas viandas y bebida (que no falte). Hemos dispuesto en el patio de la casa una mesa con lo llevado. Además nos hemos trajeado para la ocasión, como corresponde a los grandes eventos.

La cena ha sido abundante, demasiado (ha sobrado de todo), en un ambiente relajado y ameno.

Después de cenar, hemos tomado un “agua de valencia” que Alejandro ha elaborado para el momento. Embriagadora (creo que  se ha pasado un poquitín con las medidas de alcohol... o quizá ha sido el vino....).

Hemos entrado a la sala iluminada por velas y adornada con flores para la ocasión, suena una musiquita de fondo. Alfonsi ha sacado una baraja del tarot. Nos ha hablado un poco de la misma. A modo de juego nos va a “echar la carta”. Separa los  arcanos mayores de los menores, los deja sobre el suelo y cada uno de nosotros coje una carta que luego ella va a interpretar. Es muy tarde...alguno de nosotros se queda medio adormilado. No recuerdo cual fue la carta que interpretó para mi.

Este fin de semana nos quedamos a dormir la noche del sábado. En principio yo esto de dormir compartiendo lugar con tanta gente.....no era algo que me entusiasmara demasiado. En realidad no me siento libre para moverme y como además ronco ( y es algo que no puedo evitar) pues termino avergonzándome. Así que aunque de forma reacia me quedé y....bueno  no se acabó el mundo por ello.

En la mañana del domingo, algo resacosos unos y todavía adormilados otros (el día de ayer fue muy intenso) hemos estado buscando entre la naturaleza regalos para los compañeros del grupo. No me ha resultado nada fácil encontrar los apropiados. El motivo es que aún no les he calado lo suficiente para ello. Recojo más objetos que personas en el grupo.

Una vez delante de ellos pensaré a quien regalar cada cosa. Seguro que si les miro me inspiraran que darle a cada cual.

Entramos a la sala en la que aún quedan restos de la decoración de anoche. Alfonsi ha puesto un puff en el medio de la sala. La dinámica es que el agasajado con los regalos se sitúa en el centro sentado en este “trono” improvisado mientras va recibiendo los obsequios

Alfonsi nos ha llenado con un Orujo unos chupitos.....ricos y con enganche. Veremos como termino con tantos “grados”...

Paso ante mis compañeros:

Para Jesús: dátiles. Maduros es como más dulces y ricos están

Para Víctor: Rama de pino. El árbol del pino da sombra y está arraigado a la tierra

Para Marta: Una piña del pino. Compacta, cerrada y con frutos muy apreciados dentro. (terminan abriéndose)

Para Amor: Una rama de olivo. En su búsqueda constante del equilibrio entre cuerpo y mente le traerá paz.

Para Herminia: Una hoja de Parra. Fructífera y bella.

Alejandro: Una rama de la vid. “se va enredando, enredando...” y del fruto el buen vino.

Elvira: Buganvilla. Flor escandalosamente bella  y frágil. El tronco es casi invencible.

Cristina: Una flor de una planta crasa: Crece y se propaga sin casi agua

Sandra: Una rosa sin abrir. Apenas saliendo del capullo pero ya bella (que será luego!...)

Lola: Romero....ella tan silvestre, tan pequeñita...como las flores del romero y con tanta fragancia!

Pues bien a mi también me llegó el turno de recibir:

La vela grande de olor a lavanda que decoró la sala : de Alejandro

Luz: de Victor (no la vela....sino la luz)

Una hoja: de Amor

Una florecilla: de Marta

Lavanda: de Sandra

Olivo: de Herminia

Rama: de Lola

Flor de la adormidera: de Cristina y también Jesús

Una flor de planta crasa: de Elvira

Para terminar el curso una buena noticia (ya anunciada). Víctor se nos casa y estamos invitados a su boda.

Junto a su futura esposa (que se ha acercado para la ocasión) nos hace entrega uno por uno de la invitación.

Un bonito detalle de su parte. Me siento feliz por él.

El  sábado por la noche Alfonsi nos comentó como iba a ser el próximo Curso y nos hizo entrega del programa.

Este modulo ha faltado Saray. Está a puntito de parir (a Paula). Se la ha echado de menos  y quizá la próxima edición dada su estrenada maternidad no esté con nosotros.

Nos comentó que posiblemente se unan dos nuevos compañeros que no pudieron continuar otros años.

(Y hasta aquí todo lo que he podido recordar de este fin de curso)

 

TERAPIA FAMILIAR. Mayo 2008

 

El viernes nos dan unas nociones sobre la terapia sistémica que es en la que se basa esta modalidad de terapia familiar.

Me resulta muy interesante. Vemos también algo de los genogramas. Promete ser un interesante módulo.

El Sábado por la mañana, tras el café de rigor comenzamos la jornada conociendo más del genograma.

Para aprender más de cerca los tipos de familia realizamos algunos ejercicios

1º Familia Fusionada:

Nos juntamos todos abrazados como una piña. Notamos calorcito y apoyo en general (para mi es por momentos agobiante e incómodo). La “profe” pide a uno de nosotros que se separe del grupo. Cristina hace un esfuerzo por salir y le cuesta lo suyo. Entrar también es muy difícil porque en la piña es difícil encontrar un huequecito por el que asomar la cabeza.

2ª Familia Desligada

Nos situamos cada por un lado, hasta fuera de la habitación, a una distancia prudencial. El desligamiento es aún mayor si cada uno va a lo suyo y ni siquiera existe contacto visual ni verbal

Pasamos la mañana estudiando más conceptos sobre Terapia Familiar y cada vez me parece más interesante.

Vemos los símbolos que se usan en la elaboración de un Genograma. Después de esto el ejercicio que nos proponen es efectuar nuestro propio genograma para practicar con ello.

Nos ponemos en parejas y el uno al otro (por turnos) vamos haciéndonos preguntas con las que elaborar el genograma de hasta tres generaciones.

Mi compañera en esta tarea es Elvira. Nos ha llevado un buen rato (más de una hora ) elaborarlos. Cuando todos hemos terminado, volvemos a la sala y ponemos en común los resultados dejando en el centro el Genograma de cada uno para que luego otro compañero, distinto al que nos lo elaboró, lo recoja y haga una lectura objetiva.

He cogido el de Herminia. Lo miro e intento interpretarlo bien. Pues....  Me he equivocado muy mucho!!!. He perdido de vista una de las flechas así que cuando he intentado hacer una lectura, he mezclado parte de su familia con la de su marido. Y lo más grave es que cuando Herminia lo ha oído no le ha hecho la menor gracia.  Me pregunto por que ha asumido ese ademán tan serio, parece que esto del genograma le ha afectado muchísimo y lo que para mi es una simple equivocación, provocada por un lío de flechitas, a ella le ha parecido un mundo y además dramático. ¿Se ha enfadado?.  En el descanso me he acercado a ella para aclarar la confusión y el porque se ha producido y parece que ya ha quedado más relajada (aunque no del todo).

Leo lo escrito sobre mi genograma (lo hizo Alejandro). Es claro, conciso y objetivo (casi parece una ficha policial o aquella película de “Mujer, blanca, busca…”) y responde a la realidad de lo marcado en el genograma (a excepción de un pequeñísimo e intrascendente detalle). Tenía una visión de mi familia más difuminada de lo que realmente es.  El caso es que  los tengo a todos localizadísimos y si bien no me sé  la obra y milagros completa de cada uno de ellos, a grandes trazos conozco sus evoluciones.

Alejandro le pone un nombre a mi genograma: “La Piña”. (mmmm...que curioso....).

 

 

Otro de los ejercicios realizados en este módulo “familiar” está  enfocado hacía las relaciones fraternales y como ocupar el lugar  del primogénito o del benjamín en una familia afecta a nuestro modo de comportarnos y a nuestra personalidad. Para trabajar el tema hacemos grupos de :

         - Hermanos mayores

         - Hermanos medianos

         - Hermanos pequeños

Amor y yo formamos el grupo de “Hermanos mayores”. Hablamos entre nosotras las ventajas y desventajas de ocupar este lugar en la familia. Hay aspectos en los que coincidimos y en otros no. Anotamos los más comunes:

Ventajas:

1. Tenemos más fotografías y conocemos más detalles de cuando eramos pequeños (nos cuentan más historias), ya que al ser la primera los padres tienen más ilusión.

2. Estrenamos ropa siempre (o casi)

3. Mangoneas (Dicho de una persona: Entremeterse o intervenir en asuntos que le conciernen o no, imponiendo a los demás su carácter voluntarioso)  al  resto de los hermanos “Tráeme esto....” “Cierra la puerta” “Cambia el canal”....... el “poder” es atractivo y muy cómodo. (la mayoría de veces)

4. Te sientes orgulloso de que el resto acuda a ti para consultarte todo tipo de cuestiones: sentimentales, de estudio, etc....

Desventajas:

1. Abres camino para los otros (hora de llegada a casa, que puedes hacer y que no....)  y ayudas derribar las  “prohibiciones” y algunos “tabúes” que los padres te imponen por “tu bien”.

2. Depositan en nosotros la responsabilidad de cuidar de los menores (“que no se caiga” “ponle el pijama” “llévalo al parque” “juega con él”...)

3. Cuando hay una diferencia grande de edad con los benjamines llegas a comportarte de forma casi maternal

4. Depositan en ti grandes expectativas al ser los primeros en llegar (a veces puede causar frustación al no alcanzarlas)

5. Asumes, sin que te lo soliciten, funciones pacificadoras  en el subsistema conyugal.

6. En el contexto general andas como desubicada. Sientes pertenece al subsistema filial...a veces...y en otras ocasiones te sientes parte del subsistema conyugal.

Una vez anotados estos puntos parece que hay más desventajas que ventajas ....

Los tres grupos ponemos en común el trabajo que hemos realizado. Nos damos cuenta como cada grupo ve al otro y como cada uno se siente en el rol que le ha tocado ser (mayor, mediano, pequeño).

Por ejemplo ;

Los hermanos de en medio son más autónomos y actúan como mediadores entre los extremos. (yo diría que a veces hasta más pasotas)

Los pequeños pueden llegar a ser más manipuladores para conseguir lo que quieren (cuestión “de supervivencia”)

En  cuanto a mi papel de hermana mayor estoy de acuerdo con lo que dice la “profe”: pagamos el tributo de la no igualdad al involucrarnos también en el subsistema conyugal.

Aconseja ciertos rituales para compensar la balanza:

- con los padres: rituales de paso

- con los hermanos: rituales de unión

 

Como finalización del módulo hacemos vamos a ver unos trozos de película. El cine es un buen recurso donde encontrar muchos guiones de vida.

Vemos unos fragmentos de “Quédate a mi lado” (versión original : “ La madrasta”) donde vemos varios rituales de paso y de unión, que vamos comentando sobre la marcha.

También vemos un fragmento de Matrimonio de conveniencia.

Apunto algunos otros títulos aconsejados para ver en casa:

El hijo de la novia

En el estanque dorado

Billy Elliot

El turista accidental.

TECNICAS PSICODRAMÁTICAS. ABRIL 2008

 

El viernes falté a la clase teórica del curso. Ya había avisado a Alfonsi que lo haría. Era el cumpleaños de "mi niño", y después de conocernos 5 años, con el va y viene constante de nuestra relación y después de llevar un año completito sin "holas y adioses" me apetecía muchísimo celebrarlo ....todo. Acabé muertita. Podía haber sido algo íntimo de a dos, pero quería también a mi gente cerquita. Muy bien, muy bien....y encima haciendo de cocinillas cuando me agobia tanto el trasterío ese....Los efectos secundarios eran de esperar: agotamiento.

Así que he llego tarde, bastante tarde….con falta de horas de sueño, con dolor de cabeza y agujetas hasta en la raíz del pelo. Espero se me vaya pasando en lo que queda del día.

Son las 12:30 horas cuando me incorporó al grupo. Están haciendo probaturas con las técnicas psicodramáticas. Soy una pésima actriz (me darían el “antioscar” si existiera… aunque me pongo a ello. El ejercicio consiste en ir caminado por la sala haciéndose la encontradiza y al ponerse delante de la persona con la que “tropiezas” mirarse a la cara sin máscara y maquillaje . ¿Qué ves? Los miro….

Me detengo frente a Saray que me mira empequeñeciendo los ojos entornándolos, me mira con un interrogante en su mirada, los entorna cada vez más y aprieta la boca ladeando la cabeza. ¿Desconfianza? Está incómoda. Yo divertida.

Esta vez es Marta la que se detiene frente a mi. Es casi desafiante su actitud pero viene de frente, clara y con la cara despejada.. Creo adivinar que arrinconó aquella escafandra de buzo con la llegó hace meses. Me alegra.

Sandra tiene unos ojos que son como océanos. No es nada nuevo esto que digo. Sandra no se da cuenta de cómo engulle su mirada (¿o si?). Esta vez su pupila es un espejo en el que me contemplo reflejada, literalmente. Son su cortina para la luz y el ruido que le vienen del exterior. Me sorprende su habilidad malabar con los ojos.

Me he parado frente a María, la profesora de este módulo, soy yo la que ladeo la cabeza y me apoyo de lleno sólo en un pie. Dice María que me protejo. Yo creo que lo que hago es esperar, hasta preguntar. Quizá solamente sea un problema de altura (ladeo la cabeza para menguar de estatura, eso me hace más igual o para que el personal no se me asuste).

Me voy a comer a casa. Aún tengo dolor de cabeza.

Después de comer y tras tomar grandes dosis de cafeína, de vuelta a la dinámica de grupo. Estamos en tiempo de ocio. Hora del recreo. El ejercicio consiste en salir al patio de recreo y jugar como cuando eramos niños. He tenido la misma sensación que cuando era niña: no sabía como acercarme al resto, que decir, que hacer, si jugaba o no . Cuando se me ocurría algo sólo lo decía bajito, apenas se me oía. A veces pasaba que alguien me oía y repetía lo que yo había dicho y yo sentía que se apropiaban de mi idea. Pero daba igual. No jugaba en equipo, sólo imitaba al equipo, como diluyéndome en él grupo. Ya empezaba por entonces a dilucidar que es más cómodo (ahora sé que es cómodo pero no conveniente).

Me afloró demasiado pronto la vena responsable. Que niña más vieja fui!. Y que aburrido era jugar al elástico o la comba. Yo quería dibujar, leer, jugar a ser mayor. Entonces me dejaba llevar por la euforia del momento para sentirme así una más del grupo.

Mi infancia no es inolvidable: ni por mágica ni por sombría. Es un lugar neutro, ni blanco ni negro, de los de “ni chicha ni limoná”.

Mis progenitores tenían puestas en mi unas expectativas que definieron en voz alta en algún momento: “Y tú que te creías que tu hija iba a darte sopitas cuando te jubilaras…” le decía mi tío a su hermano. Mi padre asentía con seriedad y resignación. Es uno de los episodios que guardo en mi memoria.

“Debo mantener el control” ha sido una frase constante y repetitiva desde que cumplí los 6 años. Por mi tamaño y altura, más grande que lo normal (al menos en aquella época) he creído tener más fuerza y la certeza que en juegos de grupo iba a lastimar a alguien. Unido a mi torpe naturaleza me ha limitado en mis relaciones con los demás.

María me dice que normalmente el crecimiento rápido hace que dejen de hacerte mimos y caricias antes de tiempo. (Ahora recuerdo a mi madre diciéndome que ella siempre ha sido poco cariñosa y besucona….). Realmente echo de menos esas atenciones. También comenta el papel que protectores que asumen los niños que crecen antes que los otros.

Sandra y Cristina realizan un ejercicio de esculturas bastante interesante y con una lectura muy clara para mi y por supuesto para Sandra que es la que está trabajando en ello.

De este módulo me llevo cierta tranquilidad de comprobar que no soy tan distinta al resto de los mortales en lo que respecta a las relaciones con los demás y con mi propia familia, como dice el refrán popular “en todos sitios cuecen habas”.

María me hace un comentario: dice que le emocionó cuando le hablé de mis sobrinas y de cómo me encantaba jugar con ellas a todo, todo, todo porque con ellas podía hacerlo sin miedo al rechazo. Yo también me emocionaba cuando lo contaba y vuelvo a hacerlo al oír el comentario.

11 NOVIEMBRE DOMINGO POR LA MAÑANA

Empezamos con una ronda en la que cada uno cuenta como le ha ido la noche, y que tal se siente esa mañana de domingo.  Cuentan sus sueños. Yo no he tenido ningún sueño. Me hubiera gustado, así quizá sabría que algo se remueve por dentro, que ha tocado algún hilillo. Ya sé que sentimientos y emociones son universales pero me cuesta retenerlos....conjurarlos. Me gusta el entusiasmo de los demás, casi lo envidio.

Si cuesta encontrarse con la mirada del otro, sin desviarla hacía otro lugar, más complicado resulta ponerse delante a propósito y mirarse uno al otro...más allá de los ojos, que por algo son el espejo del alma. Es como jugar al "veo, veo...". Te sientas frente a frente y uno a uno los voy viendo con una claridad que me conforta. Alguna máscara, algún maquillaje se ha diluido y creo ver quien hay detrás. Claridad es la palabra. (de fondo la música de Rosa Zaragoza, todo un descubrimiento).

 Breves nociones de cómo es la comunicación en Gestalt. Teoría:

-         hablar en primera persona y presente

-         ser responsable de lo que se dice (y hace)

-         Evitar la conjunción "pero" (mejor decir aunque....)

-         Afirmar lo que se pregunta

-         .......

Momento de ser creativo. Expresarse dibujando. Expresarse coloreando. Comunicar lo que espontáneamente me  surge. Dibujo un mandala, o algo parecido. Me parece que debe tener mucha luz. La difumino para que haga menos sombras y dejo espacios libres y otros lo llenen con lo que quieran aportar. Pretendo un dibujo luminoso y abierto, aunque en realidad no sé exactamente lo que ha salido. Lo miro y no estoy del todo a disgusto con él, tampoco del todo a gusto. Lo dejo. Me esperan. Les agradezco el que hayan estado. Me despido hasta la próxima.

10 DE NOVIEMBRE 2007: TARDE DEL SABADO

 

Es mi turno de hacer de observadora.  La compañera que le ha tocado escuchar para luego devolver lo escuchado,  ha añadido alguna cosilla "extra", aunque resulta de lo más normal que siempre agreguemos cosecha propia.  Me encanta que Marta sea tan positiva y se encuentre tan requetebién, aunque suelo ser incrédula..... Me siento bastante cómoda en el papel de observadora y hasta mas atenta, incluso creo que retuve más. Como yo no tenía que retener, no sentí la presión de hacerlo, y entonces lo hice. (que lio!).

 

He comido en casa de mi madre. Nada de tranquilidad. Aproveché para hacer la compra (tengo telarañas en la nevera). Resultado: llego estresada y tarde al curso.

 

Esta tarde continuamos con los ejercicios de escucha activa. He cambiado de grupo. La verdad es que ya me había acostumbrado a mis compis. Este nuevo grupo parece más "cortadito", menos "emocionante", ya se verá.

 

El nuevo ejercicio consiste en que el que escucha pone "cara de palo" (neutral absolutamente). Pues mira tu por donde me ha venido bien. La primera en  hablar he sido yo, y claro, tal y como venía de acelerada he aprovechado para soltar lo que me pesaba y me ha servido la impasibilidad de la "cara de palo" frente a mí. Luego de observadora. Luego yo de "cara de palo": me sorprendo a mi misma haciendo esfuerzos para mantenerla, creí que me iba a ser mas fácil de lo que ha sido.

 

Al terminar el ejercicio me sentí bastante rarita, creo que a mis compañeros  les ha faltado involucrarse mas en este ejercicio, han contado historias que considero muy "Light"...o quizá es que yo voy demasiado acelerada. Piso freno y espero a ver que pasa.

 

He recibido un masaje por la cara y el pelo y la cabeza de mis compañeros. La música de fondo relajante....Voluntaria para todo lo que sea masajearme. Y es que siempre es un placer y ciertamente las manos comunican mucho de las personas, hay manos  frías, manos tímidas, manos calientes, manos vigorosas, a veces las mas grandes no son las tiernas...a veces si.

 

Como colofón al día: un poderoso y multitudinario abrazo.  He tenido que hacer verdadero equilibrio para no caer pues  me pillo justito en el epicentro del "seismo". Agobiante pero muy graficante.

10 DE NOVIEMBRE 2007: SABADO POR LA MAÑANA

En la primera ronda se ha hablado sobre el día de ayer. Yo no estuve así que no opino. Toca presentarse y como siempre no se que decir, ¿formalmente?: donde trabajo, que edad tengo, estado civil... ¿informalmente?: cual es mi color favorito, mi hobbie......Bueno finalmente ha sido un híbrido: un poco de cada. (es increíble lo que me cuesta hablar de mi , de quien soy, a estas alturas y camino al medio siglo...). Curioso el turno de preguntas y respuestas. Monotema y reiterativo (mira que somos machacones....).

 

Un pequeño descanso. Mi primer impulso es salir a tomar un café en casa (me queda muy cerquita), luego he creído mucho mejor idea quedarse con los compañeros..... para empezar a conocernos, recuperar el tiempo y sentirme más cómodas en las horas que pasaremos juntos.

 

Después del "kit - kat" hemos realizado una actividad dirigida a la toma de contacto con el cuerpo. Comenzamos andar descalzos por la tarima (soy friolera y me dejo los calcetines). Aceleramos el ritmo para empezar a trotar (me acuerdo de el juego infantil "al trote, al trote....al galope, al galope...). Siento mucho más las plantas de mis pies apoyándose en la tarima. Me paro. Ya no siento el frío. Se han calentado y hasta creo que han crecido. Los noto más grandes (ya sé que no....). Me siento más anclada al suelo por los pies.

Turno de las rodillas: las muevo, las roto, las giro.....menos mal que responden.

Le toca a mis caderas. Bueno al cabo me vinieron muy bien las pocas clases de danza oriental que tomé. No están anquilosadas del todo.

Nos ponemos en movimiento de nuevo. Ahora mientras ando, a un ritmo que yo misma me marco, el "quid" está en contactar con la mirada con el/la que nos vamos encontrando. Me resulta incómodo que la mayoría desvíe la vista, aunque comprendo que es lo habitual, que resulta harto difícil mantener la mirada de alguien desconocido (que aún es lo que somos).

La idea ahora es decirle algo, lo primero que se te ocurra al que se encuentra conmigo.....no se me ocurre palabra, por mucho que me empeñe....nada....así que dejo de empeñarme (la inspiración brilla por su ausencia, y contra eso no hay empeño que sirva...).Me tranquilizo para escuchar a la compañera, a Amor contar porque está intranquila.

Me toca hablar de mi a mi compañera Amor. Le cuento lo que me preocupa y lo hago sin esfuerzo (acaso tengo ya entrenamiento en eso). Su juventud no es obstáculo. Como siempre creo que no me explico bien, que me falta claridad y coherencia, me sorprende momentos después cuando Amor me devuelve lo que yo le he contado, la coincidencia tan enorme con lo que yo he dicho (o he querido decir).

Comienzo a sentirme más cómoda con el entorno. Poco a poco.

 

Para escucharlo: